lunes, mayo 23, 2011
SUEÑOS ROTOS
Cb Promobys caé ante Andorra por 61 a 72.
Fatídico tercer cuarto.
Demasiada presión; jugar en casa pudo ser un arma de doble filo.
CB Promobys BS Hoteles: Fede Bavosi (17), David Ortega (2), Ryan McDade (4), Iván Matemalas (9, 1 triples) y Víctor Pérez (10) –quinteto inicial-. También actuaron Rafa Rufián (7), Nick Maglisceau (4), Berni Castillo, James Keefe (2), Luis Parejo y Paco Carrión (3, 1 triple).
River Andorra: Néstor Zamora (4), Rafael Casals (10), James Holmes (7, 2 triples), Pablo Sánchez (1) y Rob Johnson (9) –quinteto inicial-. También actuaron Andreu Matalí (16, 1 triple), Jon Santamaría (15, 2 triples), Álex Ros (6) y Fernández.
Parciales: 17-12, 36-32,35-50,61-72.
No pudo ser. Se acabó el sueño y la temporada para los chicos de Herrera y la afición tijoleña. En el quinto y definitivo partido, Promobys no encontró soluciones a tiempo y Andorra se planta en la final tras una eliminatoria en la que se ha sentido superado por momentos, pero en la que ha sabido renacer a tiempo. Y tanto.
En la previa se hablaba de demasiadas cosas. Mucha expectación, pese a que el día no parecía el más adecuado en medio de la vorágine electoral y a una hora temprana.
Lo más comentado; el desencuentro entre Pablo Sánchez y los aficionados trasladados a Andorra en el cuarto partido. Una pancarta al fondo del pabellón se lo recordaba al ex de Tíjola.
Todo quedó en nada al empezar el encuentro. Porque además Promobys salió en tromba y un inspirado Matemalas se encargaba de los siete primeros puntos de su equipo, que hubieran podido ser diez si el aro no escupe otro triple que se salió de dentro. Nadie entonces podía imaginar que sería el único triple útil del partido para los locales. Andorra reaccionó bien, con Zamora llevando mejor el "tempo" del partido y enfriando como podia el ambiente. La tensión era máxima. Muy pronto Matalí empezaría a dejar su huella, y encabezó un parcial de cero a nueve para los visitantes. Fruto de la tensión un mate fallado por Jhonson se jaleaba en la grada, y un roce entre Parejo y Holmes al dirigirse a los banquillos en el tiempo muerto, la elevó a su máxima expresión. Pasase lo que pasase entre ellos, los colegiados no quisieron saber nada de la jugada ante la indignación de algunos.
Lo de Tíjola frenaron bien a Pablo, quizá empequeñecido por su exceso verbal, y cerraron bien al inteligente Johnson. Pero como en toda la serie, Matalí y Santamaría estuvieron de nuevo de dulce. El descanso llegaba con un preocupante 24 a 32. Una inoportuna torcedura de tobillo de David Ortega complicaba más si cabia el partido. El segundo cuarto no fue bueno para los de Herrera, pero el tercero no resolvería nada. El tiro exterior local estaba desaparecido, y debajo de los aros la lucha era feroz y no resolvía los problemas. Sufría Tíjola para anotar, y los del Principado empezaron a tomar distancia a base de triples. Holmes aparecía poco, pero cuando era preciso. Y nadie se acordaba de Pablo Sánchez porque Santamaría se bastaba solo. La impotencia local tomaba formaba hasta en tiros libres fallados. No era el día de los locales. Y no había más espacio. Al final del tercer cuarto el partido ya parecia decidido. Solo el recuerdo de las tardes heróicas de la fase regular, donde se arreglaron en segundas partes antológicas lo tirado por la borda, mantenía viva la esperanza en la hinchada, que no dejaba de animar. En Tíjola todo es posible.
Y a eso tocaba aferrarse. Pero hasta Casals, con un rol suplementario, se permitia el lujo de robar balones bajo el aro local. Parecía imposible. Y por esta vez lo fué. Fede apareció casi a la desesperada ya en el último cuarto, para mandar una remontada que se quedó en conato. A ocho puntos se colocaron los locales, 52 a 60. Todo el almanzora rugía para impulsar a los suyos. Aunque Matemalas ya estaba eliminado, Zamora y Matalí también tenían problemas de faltas. Pero el aro que tantas remontadas y tardes gloriosas ha visto, seguia siendo demasiado pequeño para los almerienses. El River jugará la final ante Mallorca. Tocó perder. Aunque se luchó hasta el final.
Y anotó Carrión...
Dicen que la derrota tiene una dignidad que no está presente en la victoria.
Ayer, mientras el River celebraba su pase a la final,
los locales se derrumbaban ante su público.
Si el encuentro tuvo una tensión excelsa,
no se podía pedir más "emoción" al final.
El compromiso de este grupo es dificil de calificar. Los ojos enrojecidos lo demostraban.Perdieron, pero lo hicieron con la cabeza bien alta.
Y les dolió más por su hinchada que por ellos mismos.
Han sido el orgullo de una localidad y de un club único.
Han llevado el nombre de Tíjola por toda España. Y lo han hecho,
sabiendo que la experiencia de jugar para este club es distinto a todo.
Alli estaban, ocultando sus rostros bajo las toallas, hombres como Maglisceau,
al lado de su "pequeña", que no sabia muy bien que pasaba.Un hundido Matemalas que no pudo encontrarse con su Mallorca en la final. Víctor, el capitán,
estaba destrozado. Nadie como él ha simbolizado la comunión con la grada.Solo,
en medio de la pista, dió la cara hasta el último momento. Que decir de Fede,
absolutamente desconsolado, como Parejo, Ortega, todos desbordados por lo que sentían.Incluso con los focos ya apagados, la charanga seguía animandoles. Todos en la grada o en la pista,saben lo especial de esta utopía. La foto del día pudo ser cualquier rostro desencajado por la emoción.Pero también pudo ser otra. La pequeña sonrisa del día, la gota de cal en la inmensidad del desierto. Cuando Carrión entró al partido, restando solo unos segundos, Fede se fue a la banda,buscando algún agujero donde encontrar consuelo. Carrión, no estaba viviendo su finalde partido soñado. Sin duda hubiese imaginado una entrada en pista con el partido ganado. Y hubiera soñado su triple para certificar el pase a la final.Pero ayer nada fué como se esperaba. Por eso cuando el balón entró, por un momento el infierno fué más dulce, más suave. El canterano lo celebró solo un instante,y luego se giró para dedicarselo a sus compañeros en el banquillo. Se esfumó el sueño de todos. Pese al esfuerzo, pese al compromiso. Quién lo iba a decir.La última canasta del año fue de "Paquillo". Hay ocasiones en las que se pierde, pero también se gana.
sábado, abril 30, 2011
jueves, abril 28, 2011
COMIENZA EL PLAYOFF
Oviedo, único equipo que ha ganado en Tíjola este año.
O’Leary, su gran baza.
Fede Bavosi recuperado a tiempo.
LLega el momento de la verdad. Oviedo fue un gran rival en la fase regular, y el único equipo que ha ganado sus dos enfrentamientos con Promobys Tíjola este año.
No hay por tanto ninguna relajación en los hombres de Herrera. El club, que ya ha movilizado a su afición, espera llenar el pabellón, y que esta demuestre que son únicos en la categoría. El viernes por tanto, primer asalto de la serie, y las espadas en todo lo alto.
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